El 2020 y parte de 2021, el mundo se encontró inmerso en un fenómeno poco natural, y trajo consigo una serie de cambios profundos en las formas de trabajar de (casi) todos los trabajadores y empresas. Con la pandemia de Covid-19 y los largos confinamientos, que se han impuesto en la mayor parte del mundo, se ha tenido que evolucionar o expandir una forma de trabajar que ya se venía estudiando o ensayando, pero que aún no era algo utilizado frecuentemente por las organizaciones y empresas, hablamos de: el trabajo remoto.
Las compañías de telecomunicaciones han desarrollado un papel fundamental en este proceso, ya que son las encargadas de poder comunicar a los trabajadores que se encuentran en diferentes puntos geográficos con las empresas y sus plataformas de trabajo.
Ante esta nueva era de trabajo, las empresas de telecomunicaciones se encuentran en constante innovación para poder acercar a las empresas productos y servicios que generen soluciones digitales para sus comunicaciones con los trabajadores, proveedores, clientes y demás entidades. Se estima que un 88% de las empresas, están intentando o imponiendo el trabajo remoto, ya sea de forma total o híbrida, una gran porción de las empresas ha tomado esta iniciativa para comenzar a desarrollar este nuevo camino.